Historia
Como ya habréis podido comprobar en anteriores post, nos gusta escudriñar en las raíces gramaticales e históricas de los nombres de las flores que os presentamos. En esta ocasión os vamos a hablar del narciso, una delicada y bellísima flor. La etimología de este nombre deriva del griego narkào (narcótico) y se refiere al olor penetrante y embriagante de algunas flores.
La mitología griega nos cuenta la historia Narkissos, un joven que se enamoró de si mismo al ver reflejada su imagen en una fuente. Obsesionado por su belleza, incapaz de apartarse de su imagen, acabó arrojándose a las aguas.
Detalle de ” Eco y Narciso”cuadro
de John William Waterhouse
En el sitio donde su cuerpo había caído, creció una hermosa flor amarilla, con pétalos blancos alrededor de su cáliz, a la que Zeus dio el nombre de Narcissus. (Imagen: Narcissus Yellowcheerful)
Características
El narciso pertenece a la familia Amaryllidaceae. Comprende numerosas especies bulbosas, la mayoría con floración primaveral, aunque hay algunas especies que florecen en el otoño. 
Plantación
Junto con los tulipanes, el narciso es una de las plantas bulbosas más cultivadas en primavera. Fácil de naturalizar en el terreno, su cultivo es sencillo. Como en el resto de la bulbosas, es necesario proporcionarle un suelo rico en materia orgánica y buen drenaje para evitar la pudrición de los bulbos. Se plantan en otoño y florecen a principios de primavera.
Los narcisos encuentran multitud de aplicaciones en jardinería. Por ejemplo: naturalizado en los prados y las grandes superficies de césped de los jardines… 
o formando pequeños grupos junto a arbustos o plantados en rocallas. Prefieren lugares soleados aunque aguantan la semisombra. Soportan las temperaturas bajas pero debemos evitarle el frío extremo. 
Si plantas en macetas, resguárdalos de las heladas fuertes en un sitio oscuro, fresco y seco. Cuando asome el tallo ponlos al sol pero por la noche hay que volver a guardarlos si las temperaturas son muy bajas. Si fuera necesario, tutela los tallos con unas cañitas de bambú o con palitos para que no se inclinen. 
Cultivo forzado
En el caso de los bulbos, el forzado es particularmente fácil. Los bulbos se pueden forzar de tres formas distintas: plantándolos en tierra, colocándolos entre piedras o sobre un recipiente con agua.
El narciso es de las bulbosas más fáciles de forzar. Si durante los meses de invierno te apetece disfrutar de estas preciosas flores en tu casa, no tienes más que seguir paso a paso los consejos que encontrarás en el artículo que nos ofrece Infojardín. Además de consejos sobre el forzado de los bulbos, encontrarás también todo lo relativo a las características, plantación, conservación, multiplicación de las bulbosas y el cuidado de tus flores, ya sea en el interior del hogar, … (Imagen: MARQ interiorismo )
… en el jardín o cortados en precioso jarrón. Imagen: Pinterest
Y como no… nuestras propuestas
Hasta el próximo post amigas de las flores…
Fuentes: Wikipedia, Real Jardín Botánico, Infojardín, Google y Pinterest.
