No nos cabe la menor duda de que si Papá Noel y sus renos mágicos hubieran asistido a cualquiera de las cuatro bodas navideñas, se habría sentido como en su casa . Los diferentes elementos utilizados en la decoración de cada uno de los salones aportaron el toque cálido y acogedor de los ambientes navideños.
Boda navideña en El Esquileo
En el jardín de El Esquileo, un bodegón invernal recibía a los invitados
En el Chill Out se encontraba la deliciosa mesa de dulces y golosinas.
Flores de Pascua y tulipanes rojos, artísticos abetos cuajados de pequeñas velas, altos candiles y dorados fotóforos decoraban el bodegón trasero
Tulipanes y Amaryllis para las mesas; guirnaldas en las paredes y esferas de clavel rojo y musgo colgaban del techo del gran salón.
Boda navideña en El Campillo
El color blanco se adueña de El Campillo ¡ Es Navidad! Pequeños abetos escarchados, paniculata, tulipanes, Verónicas , candiles y velas para recibir a los invitados.
la paniculata era blanca, las verónicas eran blancas, los crisantemos eran blancos, los tulipanes también blancos y… todo era blanco como la nieve
Fotóforos dorados, piñas y figuritas navideñas completaban la decoración de la mesa presidencial.
Y como en Navidad todos somos un poco niños, en el jardin central de las mesas de invitados una graciosa casita blanca protagonizaba el conjunto decorativo
Boda navideña en el Palace
Este salón respiraba refinamiento y elegancia por techos y paredes. La luz se filtraba a través de los ventanales y matizada la blancura, creando la ilusión de paisaje nevado. Era tal la belleza que no quisimos romper el encantamiento con excesos decorativos. Ya dijo el gran Mies van der Rohe que “Menos es más”.
Por eso diseñamos una decoración minimalista y exquisita: nidos de rosas, velitas y fotóforos dorados en la mesa presidencial
y para las mesas de invitados utilzamos Flor de Pascua y pequeños abetos nevados
y centros de rosas, safari y mini pimientos ornamentales.
Boda navideña en La Quinta del Jarama
Fantasía navideña para una boda Rustic ChicÉrase que se era un país encantado en el que vivían la luz y la escarcha, la flor y el fuego, la naturaleza y el diseño
Eran tan mágico aquel lugar que del árbol del paraíso colgaban las estrellas, mientras que la paniculata y los tulipanes se acurrucan bajo el tronco.
y el río de la vida, en lugar de agua, precipitaba flores por sus cascadas
Por todos aquellos prodigios y maravillas, los enamorados elegían aquel reino para contraer matrimonio y celebrar grandes banquetes de boda
y trenzaban sus coronas nupciales con sueños de oro para ser felices y comer perdices.
y colorín colorado las cuatro bodas navideñas con alegría y gran éxito se han celebrado.